domingo, 2 de mayo de 2010

FestiCani: Plaza fija en las fiestas de Canillejas



Si hay algo que nunca falla en la celebración de las fiestas del barrio de Canillejas en Madrid, ese algo es el FestiCani. Seis años de trayectoria avalan a este “festival” que, organizado por la Asociación de Vecinos de Canillejas, consigue subir a los grupos musicales del distrito al escenario de las fiestas. En su última edición, como es de suponer, el Festicani no decepcionó. De nuevo consiguió llenar la calle Esfinge, que desde hace años alberga las fiestas del antiguo barrio madrileño, de buena música, alegría y gente, por supuesto. Una fiesta en toda regla.

El dúo de Hip Hop “Atila y nueve” fueron los encargados de abrir el evento cuando el sol aún no se había escondido y el público parecía escaso. Pero sus versos fueron suficiente para atraer a todo el que pasaba por allí convirtiendo su actuación en un verdadero espectáculo. No faltaron ni sonrisas ni aplausos. Y ellos se las merecían. Este dúo zaragozano, que se deshizo además en halagos y menciones a las fiestas de Canillejas, demostraron tener verdadero talento sobre el escenario. Los jóvenes cerraron su actuación poniendo en marcha una serie de divertidas improvisaciones que a nadie dejaron indiferente... La cosa no había podido comenzar mejor.

Skalamandra dio el relevo a los raperos en lo que fue, como en su propia canción dicen, todo un “Skalamandra Show”. Un joven grupo natural de Canillejas que promete. Varios temas propios y míticas versiones nos hicieron bailar, saltar y cantar al ritmo de buen ska y punk rock. El ecuador del festival llegó de la mano de La Reserva, un Pop Rock al estilo de quien lleva varios años tocando y se le nota. Este trío demostró, además de que tiene experiencia y tablas en el escenario, que la música es lo suyo.

Cada vez había más gente alrededor del escenario, y el momento cumbre de la noche llegó con los Elephant Stone. Rock & Roll en mayúsculas, Rock & Roll al más puro estilo de los setenta. Todavía son unos chavales, pero les corre música por las venas. Una voz que no pasa desapercibida para nadie y una música a la que ningún par de pies pueden resistirse. Jóvenes y no tan jóvenes bailaron frente al escenario durante la actuación más animada de toda la noche. A medianoche, como es tradición, vinieron los fuegos artificiales. Pero aún quedaba más. El espectáculo fin de fiestas lo trajo “X Inercia”, un grupo punk rock que, desprendiendo buen rollo y buena música por los cuatro costados, no defraudó a un público que cada vez estaba más animado.

Un año más, el festival más consolidado del barrio de Canillejas demostró que no hace falta irse muy lejos para llenar el escenario de las fiestas de buena música. Aunque todavía no se ha cerrado la fecha ni las actuaciones, el FestiCani regresará con una nueva edición este verano.

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